SINOPSIS Y REFLEXIONESPARASHÁ VAYIKRÁ #24
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Toráh Diario

SINOPSIS Y REFLEXIONESPARASHÁ VAYIKRÁ #24




Parashá Vayikrá #24 (3/20/2021)

1: Vayikrá 1:1-13

2: Vayikrá 1:14-2:6

3: Vayikrá 2:7-16

4: Vayikrá 3:1-17

5: Vayikrá 4:1-26

6: Vayikrá 4:27-5:10

7: Vayikrá 5:11-26

Maftir: Vayikrá 5:24-26

Haftará: Yeshayahu (Isaías) 43:21 - 44:23

CR: Mattityahu 1:1-3:17


El termino Vayikrá proviene del lexema ויקרא (Kra) llamar, también indica que Hashem desea hablarle a Moshe Rabenu y lo llama directamente a él; como también hoy quiere llamarte a tí. El Midrash (Vayikrá Rabá 1:5) nos habla de la humildad del varón de Di-s, Moshe Rabenu. Cuando este escribía la Torá decidió escribir la última letra hebrea de la palabra Vayikrá reducida, es decir, más pequeña que las demás, ya que él no se consideraba digno de merecer el título de maestro imbuido en esta palabra. Por lo que la letra א, la de menor valor gemátrico (1), significa enseñar, sugiriendo que la persona ha de ser pequeña y humilde. Fue justamente la humildad, una de las herramientas más poderosas, la que hacía que los cielos estuvieran abiertos para él 24/7.


Nuestros sabios dicen que la humildad es superior a la sabiduría. El Proverbio 22:4 afirma: “El temor a Di-s es el fruto de la humildad. De manera que, de acuerdo a las Santas Escrituras, la humildad es más fundamental que el temor a Di-s y que la sabiduría.


“¡Pero el hombre Moshe era humilde en extremo, más que todo hombre sobre la faz de la tierra!Bamidbar (Números) 12:3


De todas las cualidades de Moshe Rabenu, la que más alaba la Torá es la humildad. Una de las características más relevantes de la humildad, es que está íntimamente emparentada con la obediencia. Ella es la columna que sostiene a la humildad. El humilde no cuestiona a Di-s; le obedece...


El segundo día de la creación Di-s creó una división entre las aguas celestiales de arriba del firmamento y las aguas terrenales de abajo. Dice el Midrash, que las aguas de abajo se quejaron porque ellas también querían estar en un punto espiritual alto como las otras. Para consolarlas, Hashem hizo un pacto con ellas de que las aguas tendrían una participación en el servicio del Templo a través de la sal, la cual viene de las aguas del mar. La sal sería colocada en todo el sacrificio sobre el Altar, y también la propia agua se derramaría sobre el Altar de Sucot. Se dice que la sal tiene dos propiedades: puede ser negativa, pues puede corroer entre otras cosas; como también puede ser positiva, pues esta preserva la materia orgánica (los alimentos). El pacto de la sal nos enseña que el servicio en el Altar, si es realizado apropiada y sinceramente, preserva a Israel y preserva la vida de los que lo sirven a Él; mas sin la sal, comienza el proceso de descomposición, la destrucción del Templo y el exilio.


Finalmente veremos uno de los sacrificios más apreciados por Hashem, el Korban Shelamím o la ofrenda de paces. Esta ofrenda es traída voluntariamente por una persona o un conjunto de personas, que son motivadas a expresar su amor a Hashem, su gratitud por Su bondad, y para reforzar la cercanía a Él. Esta ofrenda de paces es traída como un tributo a Hashem, Bendito es Él, y al ser motivada la persona a traer la ofrenda, ella reconoce las formas de Su bondad y Su constante favor para con nosotros. El nombre de Shelamím tiene varias razones; conforme al nombre, es derivado de la palabra Shalom que significa paz, ya que la ofrenda de paces tiene la capacidad espiritual de incrementar la paz en el mundo. Por otro lado, el Korban refleja la paz de la conciencia del pueblo, y la conciencia del que lo trae a Di-s como en un pacto de paz, en el que expresamos nuestra conformidad y alegría por todo lo que Hashem nos ha otorgado.


Del Korban Shelamím se trae una porción al Altar, otra se le da a los kohanim, y otra es para Hashem. Su nombre simboliza la paz que resulta cuando son consideradas todas las partes, esto finalmente crea una armonía entre el mundo espiritual y el mundo material. La palabra Shelamím se deriva también de la palabra shelemút, que significa integridad o perfección, teniendo en cuenta que la persona que trae esta ofrenda, no la trajo por necesidad de expiar por algún pecado, sino por el deseo voluntario de integridad y perfección, del cual gozaban después de haber traído la ofrenda aquellos que tuvieron el mérito de traerla.


Esta parashá está llena de sacrificios que se hacían en el Templo, ofrendas de sacrificio animal y vegetal para rendirle honra al Di-s Altísimo. Por un momento usemos nuestra imaginación, pongámonos en el lugar del Eterno; es decir, ver como Hashem ve...entonces nos daremos cuenta que Él no quiere sacrificios animales, ni siquiera los vegetales. Él quiere tu atención y tu obediencia.


Compartiremos hoy un pequeño gran secreto... Te pregunto, ¿Quieres robarte el corazón del Eterno y provocar que Él mismo diga que tu tienes un corazón conforme al de Él, como lo hizo con el Rey David? Veamos que nos dicen las Escrituras:


“Entonces dijo Shemuel: Acaso es deseo para el Eterno los holocaustos y sacrificios, como el obedecer la orden del Eterno? He aquí el oír es preferible que la ofrenda: y es mejor prestar atención que el cebo de los carneros.” 1ª Shemuel (Nebiím) 15:22


Este es el querer del Eterno, que lo escuches a través de Sus Escrituras y le obedezcas. Entonces entrarás en las transdimensiones celestiales donde tendrás un diálogo extrasensorial con el Eterno. Donde tu serás emisor y receptor a la vez, y además de hijo(a) te llamará su amigo(a). He aquí el secreto de los grandes hombres y mujeres que Hashem levantó para Su servicio, hombres que usaron como escudo la humildad... Abraham, Moshe, David, Isaac, Jacob, Sara, Rebeca, Lea, Débora y muchos más. Todos tenían un común denominador: Prestaban atención, obediencia y humildad.


Nuestro Santo Ribi, su majestad Yehoshua Hamashiaj dijo: “Ya no os llamó avadim (siervos); porque el eved (siervo) no sabe que hace su Adón (señor), mas os he llamado javerim (amigos), porque la Torá oral que oí de mi Padre, os la di a conocer.” Yohanan (Juan) Asofer Hamaljutí CR 15:15


¡Shabat Shalom!


Por: Yehoshúa Villarreal I.

Con la autoridad del Rab Dan ben Avraham.


 

Es Licenciado en Filosofía y Letras de la Universidad del Zulia. Artista sinestésico que conjuga la música, la pintura y la literatura, cuyas obras están en museos como el MEAM-España, Museo Boca Raton-USA y el MACZUL-Venezuela. Graduado de la Escuela de Arte Julio Arraga y estudió en el Conservatorio de Música José Luis Paz en Maracaibo-Venezuela. Jazán de la comunidad B’nei Tzion de Miami.



Yehoshúa Villarreal I.




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